Wagashi, los dulces tradicionales de Japón que deleitan a la vista y al paladar
Los wagashi (和菓子) son dulces japoneses artesanales elaborados principalmente con ingredientes naturales como pasta de judía roja (anko), arroz, harina de arroz, agar y azúcar.
Más que simples postres, los wagashi representan una fusión de arte, estacionalidad y filosofía japonesa, y se disfrutan tanto por su sabor como por su forma y significado.
La experiencia visual y sensorial de los wagashi
Cada wagashi está cuidadosamente diseñado para reflejar la estación del año (季節, kisetsu), festividades o elementos de la naturaleza.
Por ejemplo:
– En primavera, se ven con forma de flor de cerezo sakura o flores de ciruelo.
– En otoño, se presentan hojas de arce o castañas.
Algunos wagashi representan pájaros, montañas, olas o la luna llena, evocando la estética del wabi-sabi.
Wagashi y ceremonia del té
Los wagashi se asocian íntimamente con la ceremonia del té (sadō), donde se sirven para equilibrar el sabor amargo del matcha.
Esta tradición eleva el wagashi a una experiencia cultural y espiritual más que culinaria.
Tipos populares de wagashi
Namagashi (生菓子): dulces frescos, elaborados con anko y mochi, de texturas suaves y colores delicados.
– Daifuku (大福): mochi relleno de pasta de judía roja u otros sabores como fresa o matcha.
– Dorayaki (どら焼き): dos esponjosos panqueques rellenos de anko.
– Yōkan (羊羹): dulce en bloque de anko solidificado con agar.
– Manjū (饅頭): bollos cocidos al vapor con relleno dulce.
Dónde probar wagashi en Japón
– Tokio: tiendas tradicionales en Nihonbashi, Asakusa o Ueno.
– Kioto: especialidades en Gion y tiendas centenarias como Toraya (虎屋).
– Kanazawa: famosa por su refinada cultura del té y wagashi delicados.
También puedes encontrar wagashi en conbinis, depachika (sótanos de tiendas departamentales) y en tiendas de omiyage (お土産, recuerdos) en las estaciones de tren y metro.
¿Por qué probar wagashi?
Para saborear la tradición japonesa a través del arte comestible.
Porque es una forma de entender la relación japonesa con las estaciones y la estética.
Son aptos para vegetarianos y muchos de ellos sin gluten.